COMO ME DUELE TU
NOMBRE
De LOS SALONES DEL
ALMA. 2004 Como me duele tu nombre…
cuando lo llamo
como súplica viviente...
en mi garganta dolorida.
Se atraganta como espina
hiriendo mi ser y acaso
hasta hacer sangrar la angustia
en esta pobre alma mía.
Como me duele tu nombre
cuando lo llamo
desde la frágil sombra
de mi soledad perdida.
Entre las tinieblas de un fugaz ocaso
como un jardín de rosas
en mi pecho marchitas.
Ay...como duele tu nombre
en mi quebranto
llanero de mis sombras benditas
donde tejo mis lamentos, y mis pesares
simulando que es la luz de tu sonrisa.
Como me duele tu nombre
en mis entrañas
en la soledad de mi noches heridas.
cae como si fuera una ahorcajada
que va empuñando la vida mía,
Tú eres rey en mi baraja de ensueños
que vas rimando mi profecía...
Yo…yo sólo soy la angustia, la sola angustia
de seguirte amando todavía
Entre las tinieblas de un fugaz ocaso
me ha desangrado el pecho en carne viva
tu nombre al igual que tu retrato
se me han clavado aquí, como una espina
Y me duele tanto cuando lo llamo
como mis ojos al contemplar tu sonrisa
en aquel retrato enamorado
donde atrapó a tus ojos
la existencia mía...
Y pensar que te quiero tanto
como nunca te han querido en esta vida
Como...me duele tu nombre cuando lo llamo
menestral en mi tierra enardecida
Ese amor que duele de tanto amarte
desde mi sed carnal atardecida...
ese amor que duele al desahogarse
entre las sedas de tu voz...aquí prendidas.
Chusca que se arremete
desde la arena de tus pupilas
cuando miro tu retrato y contemplo
que miran con tantas lejanías...
OH...la ausencia de tus ausencias
azota marejadas en mi vida
azota mi alma que se consuela
buscando un refugio en tu sonrisa...
Como me duele tu nombre
cuando lo llamo
que en mi garganta sangra como una herida.
y saboreo la amarga sal de mis nostalgias
por seguirte amando todavía.
PREGONA
De LOS SALONES DEL ALMA
Cántame la vida, Vida
que yo desde aquí
te estaré esperando,
haré calzar tu melodía en mis versos,
y con mi guitarra rasguearé
toda tu voz dormida
desde el umbral de cada pena
que tú Vida
tantas veces me has brindado...
Cántame la vida, Vida
ahoga mi llanto con tu canto
no le hagas recelo a mis heridas
Vida, que son todo tu quebranto...
Cuando vine al mundo al conocerte
desvalida y temerosa
miré tu rostro llorando,
y ahora en el umbral de la muerte
desvalido mi cuerpo está temblando
cierran mis ojos para no verte
y también,
yo los cierro llorando.
Detened tu canto Vida
calla
ya no quiero escucharlo,
si ya has ganado la partida
de qué me sirve tu canto...
La larga noche que aguarda en mi lecho,
tiene campanas de estrellas y astros,
sus silencios de arrullos son como dos brazos que mecen,
aquel largo sueño
y eterno descanso...
Porque en este templo sagrado
su más preciada belleza
es no sufrir un dolor
es no llorar una pena,
sólo dormir y soñar
mientras los huesos descansan
para dejar emigrar
hacia el cielo a las almas...
Por eso,
dichoso peregrino que tocas
a las puertas del campo santo,
has llegado hasta aquí a nacer
entonces,
deja afuera tu llanto...
Porque
el sueño de los pastores
jamás debes interrumpirlo...
¿No ves que sus almas están velando
por el sufrimiento de los vivos?...
DOLORA
Del libro LOS
SALONES DEL ALMA
(Nueva versión adaptada a LOS HILOS DEL SILENCIO)
Si he de cerrar mis ojos para no verte VIDA
que te escapas como el agua entre mis manos,
tendré que esperar de ti
con todo el acecho protector de mi dolor
¡qué sosiego o barullo, ya has planificado para mi alma!.
Si he de sellar mi boca para no hablarte VIDA
por temor a reprocharte o pedirte cuentas,
tendré que abrir este torrente llanto mío
y musitar los suspiros de dolor que hay en mi cuerpo.
Porque
¡qué caricia o látigo has previsto para mi alma!.
Y si he de clausurar mi pecho para siempre VIDA
para que nunca una emoción o sentimiento reclamen
tu vació en esta tierra,
entonces
habrá de morir por siempre mi poesía,
aunque jamás se apague en mi alma su poema.
Y si acaso deba a las sombras acostarlas en mi lecho
y tenderles mi cuerpo inerte para reposarlos en ellas,
esa vida que se irá más allá de la muerte
tal vez logre encontrar un mundo más perfecto.
Porque todo me lo cobras VIDA…
VINE AL MUNDO CON TU DEUDA....
Y ya no me sirve tener fe y tener conciencia
Ya no me sirven los gritos
de aquella amargura que invade mi pecho
Ya no me sirve el sosiego de horas blancas
arrullando en mi lecho
Ya no tengo mis ojos abiertos al cosmos
de amaneceres bellos
Ni esas tardes tibias de labios amantes
que besan mi cielo...
Ya tu deuda pactó
y en mi pecho el dolor
lo ha dejado desierto...
Ya vete VIDA
ya déjame en paz por favor...
Te lo ruego.
(Nueva versión adaptada a LOS HILOS DEL SILENCIO)
Si he de cerrar mis ojos para no verte VIDA
que te escapas como el agua entre mis manos,
tendré que esperar de ti
con todo el acecho protector de mi dolor
¡qué sosiego o barullo, ya has planificado para mi alma!.
Si he de sellar mi boca para no hablarte VIDA
por temor a reprocharte o pedirte cuentas,
tendré que abrir este torrente llanto mío
y musitar los suspiros de dolor que hay en mi cuerpo.
Porque
¡qué caricia o látigo has previsto para mi alma!.
Y si he de clausurar mi pecho para siempre VIDA
para que nunca una emoción o sentimiento reclamen
tu vació en esta tierra,
entonces
habrá de morir por siempre mi poesía,
aunque jamás se apague en mi alma su poema.
Y si acaso deba a las sombras acostarlas en mi lecho
y tenderles mi cuerpo inerte para reposarlos en ellas,
esa vida que se irá más allá de la muerte
tal vez logre encontrar un mundo más perfecto.
Porque todo me lo cobras VIDA…
VINE AL MUNDO CON TU DEUDA....
Y ya no me sirve tener fe y tener conciencia
Ya no me sirven los gritos
de aquella amargura que invade mi pecho
Ya no me sirve el sosiego de horas blancas
arrullando en mi lecho
Ya no tengo mis ojos abiertos al cosmos
de amaneceres bellos
Ni esas tardes tibias de labios amantes
que besan mi cielo...
Ya tu deuda pactó
y en mi pecho el dolor
lo ha dejado desierto...
Ya vete VIDA
ya déjame en paz por favor...
Te lo ruego.
Y mientras la
tierra se oscurecía, y los punteros del reloj iban girando hacia el oriente…Vi
sus ojos clavados en mis ojos, vi su rostro rígido y tan pálido como la
nieve…Por un instante tomó mis manos y las dejó caer fuertemente sobre mi
pecho, posando sus dedos de escarcha sobre mi frente… Luego se dirigió hacia la
puerta golpeando el umbral de todos los silencios… Y yo, tendida en ese abismo
más absoluto de las horas… Comencé a desvanecerme en el tiempo y en el olvido.
Patricia
Téllez, 1958. Hija
de Luis Téllez Viera quien fuera unos de los precursores y gran folclorista de
la Cueca Centrina, y doña María Magdalena Mellado profesora básica rural. Se
inició en el campo de la poesía a la edad de 7 años, participando en talleres
infantiles, juveniles, Unión de Escritores Jóvenes. Participó en la década de
los 70 en el taller Andamio del programa Nuestro Canto de radio Chilena. Cuenta
con una publicación de un libro poemario Los Salones del Alma, en su juventud
colaboró con revistas estudiantiles hechas a pulso, y con muchos escritos que
aún no han sido publicados. Se dedica hasta la fecha además, a la investigación
folclórica, básicamente orientada hacia el estudio de los orígenes y heraldos
de la Chilena o Cueca Tradicional, cuyos estudios los inició a los 11 años de
edad con el maestro investigador y compositor Fernando González Marabolí,
formando parte de la escuela Maraboleana. Ha colaborado con conocimientos en la
grabación del disco del conjunto escuela LOS CHINGANEROS Cuecas de Barrios
Populares, y aportó conocimientos en el libro Por la Güeya del Matadero
Memorias de la Cueca Centrina. Publicó además, Los Salones del Cosmo, Santiago, 2012.
.
Felicidades Patricia Téllez, hermosos versos, hermosos poemas, gracias por compartirlos.
ResponderEliminarUn goce disfrutar esto.
"dichoso peregrino que tocas
a las puertas del campo santo,
has llegado hasta aquí a nacer
entonces,
deja afuera tu llanto..."